Si uno cuestionara hoy a los directores de TI de cualquier parte del mundo hacia a dónde apuntan sus planes para la infraestructura de TI, probablemente todos responderían lo mismo: hacia la nube híbrida. Y la buena noticia es que la industria está respondiendo al ofrecerle a las organizaciones más opciones que nunca antes. Apenas el mes pasado, VMware e IBM firmaron una importante asociación que le permitirá a los clientes del primero ampliar sus cargas virtualizadas a la nube pública SoftLayer de IBM. Este anunció se da a conocer después de que VMware y Amazon Web Services llegaron a un acuerdo similar.
Los beneficios que la nube híbrida ofrece a las empresas y a TI, así como los beneficios que ofrece el Centro de Datos Definido por Software, son innegables. Si bien todos se apresuran por llegar ahí lo antes posible, no debemos olvidarnos de los nuevos desafíos de seguridad que plantean estos entornos de cómputo de próxima generación. Es por eso que Deep Security se diseñó específicamente para la nube híbrida, y para trabajar con las plataformas de nube y de virtualización más grandes del mundo.
Lo Híbrido es lo de Hoy
La colaboración entre IBM y VMware es sólo una de las muchas evidencias que ilustran la velocidad a la que los proveedores están acelerando sus planes híbridos, en respuesta a la demanda de los clientes. Le sería difícil encontrar a un proveedor de servicios de nube importante hoy que no tenga una oferta híbrida – como IBM, Microsoft y AWS. ¿Por qué? En 2013, Gartner predijo que 50% de las empresas estarían utilizando nubes híbridas para 2017, e incluso ese porcentaje podría quedarse corto. Es una opción natural para las organizaciones que han incursionado en el cómputo en la nube con implementaciones privadas, pero ahora ya están listas para aprovechar la flexibilidad adicional, la facilidad de uso y la eficiencia de costos de la nube pública para ciertas cargas.
Pero una y otra vez, la principal barrera para adoptar la nube híbrida es la seguridad. Y esa una preocupación legítima ya que los proveedores de nubes públicas sólo proveerán protección hasta cierto punto. Los clientes deben afrontar nuevas complejidades hoy, las cuales pueden generar brechas de seguridad y afectar el desempeño de los sistemas si no se resuelven adecuadamente.
A menos que su seguridad esté preparada para la nube híbrida, es probable que le sea imposible evitar las “brechas instantáneas” que ocurren cuando las máquinas virtuales (VMs) se crean rápidamente sin la protección adecuada. Usted podría ser incapaz de protegerse contra las amenazas de día cero importantes como Hearbleed. Y se podrían provocar “tormentas de seguridad”, las cuales llevan los sistemas a un punto muerto, a menos que la seguridad se haya diseñado específicamente para la nube.
La nube híbrida es un componente vital del Centro de Datos Definido por Software, donde la infraestructura completa del centro de datos se gestiona y se controla mediante sistemas de software de inteligencia, a diferencia del hardware. Esto significa que las capacidades de cómputo, de almacenamiento y de redes pueden aprovisionarse en segundos y no en días o semanas, pero también se requiere de seguridad definida por software para aprovechar al máximo estas ventajas.
Qué necesita la nube híbrida
Deep Security está listo para la nube híbrida y los entornos definidos por software. De hecho, nuestra versión más reciente se diseñó especialmente para ampliar los beneficios de la micro segmentación de la plataforma de virtualización de redes NSX de VMware, a través de múltiples controles para brindar un nuevo nivel de seguridad para los centros de datos definidos por software. También es actualmente la solución más completa para las instalaciones de nube híbrida, la cual incluye IDS/IPS, antimalware, parcheo virtual, filtrado de URLs, monitoreo de la integridad de los archivos, inspección de registros y mucho más.
Asimismo, Deep Security está diseñado para proteger contra las amenazas de día cero a través del parcheo virtual, y brindar protección instantánea para cada VM, sin importar dónde se encuentren, todo sin afectar el desempeño de los sistemas claves. Además, el hecho de que Trend Micro trabaje de manera integrada con los proveedores de nube líderes como VMware, Amazon Web Services, Microsft e IBM significa que podemos satisfacer todas las necesidades de seguridad y de cumplimiento de nuestros clientes.
Más allá de la seguridad, me gustaría destacar las siguientes capacidades “operativas” que podrían ser una lista de control que le sería de utilidad a los directores de TI que buscan invertir en seguridad para sus implementaciones de nube híbrida:
• Aumente y reduzca su red según sea necesario; si se agrega nuevo cómputo, la seguridad se instala automáticamente para proteger las cargas de trabajo.
• Adapte automáticamente la política de seguridad para estar al nivel del espacio cambiante que ocupa el software en la máquina virtual.
• Salte entre los elementos de la nube – del centro de datos a la plataforma de nube pública y viceversa – todo a través de una sola infraestructura y consola de administración.
• Integración técnica profundad con la plataforma para facilitar de implementación y gestión; incluyendo el aprovisionamiento automático de software de seguridad, facturación integrada, etc.
Leave a Reply